jueves, 20 de octubre de 2022

LA NOCHE DEL DELIRIO VOLUMEN 4 SE PRESENTÓ EN LA PERSIANA

     Una noche de primavera, 8 de octubre, que pareció de invierno y un bar en la calle Chacabuco 667 del barrio de San Telmo llamado “La persiana”, fueron el marco romántico de una noche de poesía underground.   Allí podían verse unas pocas mesas desordenadas en un salón pequeño con vista a un escenario austero y con la magia de la prosa en sus cimientos. Sonaba de fondo rock nacional a bajo volumen, mientras se llenaba el auditorio a la par que se bebía y cenaba, entre charlas y risas.

                                       

   La música paró abruptamente y la prosa del delirio subió al escenario para dar inicio al show devenido en rito. 

    Unos tangos sentidos, emocionantes, conmovedores, interpretados con la poderosa voz de María Julia Legato, acompañada por Esteban Sabanes con su guitarra hicieron olvidar al tango de orquesta, y  condensaron en sus acordes la fuerza del momento lírico.



    La noche la inició el poeta Fernando Raki , luego le siguieron once poetas y poetisas que se intercalaban con más y más tangos.


  

 La audiencia pudo delirar entre las palabras sentidas de Fernando Raki, como también los poemas de perfecto, y alto, contenido sensual de Rubia Prohibida, hasta encontrarse dentro del mundo material poetizado por Abel Liberte.


    Debo mencionar que los pensamientos y sentimientos que externaliza el poeta y músico Esteban Sabanes dejaron reflexionando al auditorio acerca de los sucesos que atravesamos como sociedad.


                                                    

   El temario que conmueve y estremece a todos y todas, fue volcado en versos a través de las subjetividades de cada escritor. Las voces y las tonalidades de cada intérprete fueron determinantes para cada interpretación e interpelación, que se llevaron el justo aplauso, el murmullo de aprobación y concitaron el debate correspondiente.

Yo me pregunté por qué la noche del delirio y a partir de lo que vi y escuché me contesté: Noche que es  delirio real, es de la mente, del alma, de los cuerpos. Sin pretensiones académicas sólo pretende sacar de adentro  una fibra de ellxs que está en el resto. Por suerte, la gente se autogestiona, se junta, se organiza y se expresa, creando cultura,

Cobertura periodística realizada por Darío Moroldo, estudiante de segundo año de la Tecnicatura en Comunicación Social.




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